Eran 41 las empresas y entes del Estado que el Gobierno quería privatizar o concesionar a privados cuando fue presentado el proyecto original de la Ley Bases, a comienzos de año. Tras la aprobación en general a la norma que dio el Senado, la lista quedó reducida a ocho: AYSA, Energía Argentina (ex ENARSA), Intercargo, Corredores Viales, Belgrano Cargas, Trenes Argentinos, Yacimiento Carboníferos Río Turbio y Nucleoeléctrica.
En la última etapa de la negociación del proyecto, fueron tres las firmas estatales que quedaron fuera: Aerolíneas Argentinas, el Correo Argentino y Radio y Televisión Argentina (RTA).
En caso de que la aprobación artículo por artículo no introduzca nuevas modificaciones a este esquema, ahora el Gobierno cuenta con la autorización parlamentaria para avanzar con la privatización total de ENARSA y la concesión de Agua y Saneamientos Argentinos (AYSA), Belgrano Cargas y Logística, Sociedad Operadora Ferroviaria (SOFSE) y Corredores Viales.
En cambio, en el caso de YCRT y Nucleoeléctrica, el artículo 8 de la Ley Bases aprobada en general establece que “solo podrán ser privatizadas parcialmente y el Estado nacional mantener la participación mayoritaria en el capital o en la formación de las decisiones societarias”. Nucleoeléctrica Argentina tiene a su cargo la administración de las centrales atómicas Embalse, Atucha I y Atucha II.
Además, este jueves el Jefe de Gabinete, Guillermo Francos, planteó que van a enviar un nuevo proyecto de ley, específico, para privatizar tanto Aerolíneas Argentinas como el Correo.
“Respecto a las privatizaciones que estaban planteadas de Aerolíneas y el Correo Argentino, vamos a insistir”, dijo Francos, en declaraciones a Radio Mitre. “Una cosa es que no se hayan aprobado en esta ley. Presentaremos proyectos concretos sobre propuestas de concesión o privatización. Cuando uno habla de reforma del Estado tiene que hablar en serio. Esta ley no soluciona todos los problemas pero permite avanzar”.
La mayor parte del listado inicial de empresas que quiere privatizar el Gobierno quedaron en el camino, tanto en la negociación en Diputados como las últimas tres en Senadores.
En la tanda estaban incluidas YPF, Banco de la Nación Argentina y todas sus empresas controladas, la Administración General de Puertos, Yacimientos Mineros de Agua de Dionisio (YMAD), Vehículo Espacial Nueva Generación, Talleres Navales Dársena Norte (TANDANOR) e Innovaciones Tecnológicas Agropecuarias, entre otras.
De todas éstas, la que claramente le quedó atravesada a Javier Milei es Aerolíneas, tal como lo manifestó Francos este jueves.
La línea aérea estatal tiene un déficit crónico en su operación, desde que fue estatizada en julio de 2008, por el cual ha tenido que recibir asistencia del Estado por más de 8.000 millones de dólares a lo largo de los últimos 15 años.
Ese déficit operativo continúa: según datos de la Secretaría de Hacienda del primer trimestre, Aerolíneas facturó 378.000 millones de pesos, pero tuvo gastos por $501.000 millones, con un rojo de $123.000 millones sólo en los tres primeros meses de 2024.
Sin embargo, este año la línea aérea estatal no recibió fondos del Estado para compensar ese déficit. En buena medida, porque está compensado por el subsidio encubierto que le representa la posibilidad de ingresar dólares de sus ventas en el exterior y liquidarlos al valor del dólar MEP, con una diferencia a favor de 44% con respecto al valor del dólar oficial con el cual paga tanto el leasing de sus aviones como el combustible que carga en el exterior, entre otros gastos que se cotizan en divisas duras.
Aerolíneas tiene poco menos de 12.000 empleados, en tanto el Correo Argentino (la empresa con mayor extensión territorial del país) tiene casi 16.500. RTA, que incluye tanto a la Televisión Pública como a Radio Nacional y sus repetidoras, suma 2.400 empleados.
INFOALLEN - noticias@infoallen.com.ar
Tags
NACIONALES