Expuestos, ya que el proyecto contemplaba habitaciones en planta alta, quedaron los hierros oxidados de lo que iban a ser los encofrados. Ninguna construcción tiene reboque. Las veredas son la continuidad de las calles de tierra, así es que cuando llovizna el conjunto se convierten en un lodazal. Del polideportivo anunciado no están ni los cimientos. Expuestos también, al parecer, quedaron los funcionarios a cargo del plan de urbanización, entre ellos el dirigente piquetero Juan Grabois, denunciados penalmente en la Justicia Federal de Mar del Plata.
La presentación la hizo el fiscal general Juan Manuel Pettigiani, quien solicitó que se investigue al dirigente y exprecandidato a presidente de la Nación vinculado al Fondo de Integración Socio Urbana (FISU), fideicomiso destinado a la contrucción de obras para urbanización de barrios populares que ahora fue desfinanciado por el gobierno de Javier Milei. En Mar del Plata quedó a medio construir un plan de viviendas de ese programa.
El fiscal no solo pidió que se investigue a Grabois. También solicita que la investigación alcance la Directora General de Cultura y Educación de la provincia de Buenos Aires, María Agustina Vila, y la expresidenta del Consejo Escolar de Mar del Plata, Natalia Russo, por su responsabilidad en la entrega del predio ubicado en Fortunato de la Plaza entre Arana y Goiri, Namuncurá y Camusso, en esta ciudad.
Y por "su directa participación en los hechos", pide que la Justicia investigue a Fernanda Miño, Secretaría de Integración Socio Urbana -SISU-; Martín Consentino Moreto, titular de la Agencia de Administración de Bienes del Estado -AABE-, y al arquitecto Héctor Lostri, Secretario de Desarrollo Territorial, Hábitat y Vivienda.
“En el caso de los funcionarios mencionados, por su directa participación en los hechos, mientras que en el caso del señor Grabois, su participación estaría dada por el hecho de que sin él no puede entenderse, ni habría podido concretarse, toda la arquitectura política que permitió el fraude expuesto, comenzando por la designación de Miño al frente de la SISU”, explicó Pettigani.
Al referirse al polémico fideicomiso, el fiscal general cita al presidente Javier Milei cuando habla de "las cajas negras de la política". El FISU, cita, recibía al menos el aporte del 15% del dinero del impuesto a las grandes fortunas y el 9% del Impuesto País, mientras que el resto del financiamiento provenía del Banco Interamericano de Desarrollo y de fondos nacionales públicos.
"De ahí, la importancia del FISU, y del enorme monto de dinero destinado a urbanizar esos barrios, ya que estaba destinado a darles la infraestructura y, especialmente, condiciones de vida dignas, a más de 5 millones de personas. Este camino fue abandonado en Mar del Plata", apuntó el fiscal general de Mar del Plata. Es que el fondo -indica- debería tener como objetivo principal el financiamiento de proyectos de integración socio urbana para los Barrios Populares que se encuentren inscriptos en el Registro Nacional de Barrios Populares (ReNaBaP).
En su denuncia, Pettigiani sostiene que “la desviación de los dineros públicos representada en el abandono de las obras denunciadas, comienza bastante antes, cuando, en violación a lo establecido por el propio Manual de la Secretaría, se constata que la construcción se verifica sobre lotes que no sería propiedad de la unidad ejecutora, que no contarían con las exigencias urbanísticas expresadas en las normas de regulación del suelo ni la aprobación de loteos de la jurisdicción”.
El predio en el cual se desarrollaría dicho plan habitacional originariamente pertenecía a la familia Peralta Ramos, fundadores de la ciudad de Mar del Plata, se encuentra ubicado en el barrio Fortunato de la Plaza y cuenta con una superficie de 60.000 mts2, 6 manzanas.
Las tierras, a partir de la donación, no estaban destinadas a la construcción de viviendas, por lo que el fiscal -además del abandono de la obra denuncia- describe una serie de irregularidades que constituyen "la materialidad delictiva", la forma en que llegaron a quedar en manos del FISU.
Los proyectos, para erigir 64 viviendas, un polideportivo y playón deportivo descubierto, habían sido ejecutados por el Movimiento de Trabajadores Excluidos (MTE) y la Confederación de Trabajadores de la Economía Popular (CTEP).
La denuncia se presentó en la mañana de este lunes, acompañada por imágenes y una descripción a ojos de la fiscalia: "El abandono general de la urbanización es llamativo, pudiendo apreciarse a simple vista, que las viviendas ni siquiera están revocadas en su exterior, sin perjuicio de la cual, se encuentran ocupadas por familias que creyeron de esta forma tener solucionada su situación habitacional".
"Lo cierto es que al día de la fecha no se sabe a ciencia cierta quien ocupa dichas precarias construcciones, ni cual ha sido el criterio de selección para determinar su ocupación, ni quien ha dispuesto su entrega, lo cual considero debe ser investigado y determinado también”.
Entiende Pettigani que a pesar de la gran cantidad de recursos afectados, "no se cumple con las obras y se manda a vivir a las personas a un barrio con graves carencias de infraestructura, en casas sin terminar. La malversación queda expuesta, cuando los propios organismos alimentan lo que se pretendía modificar con los cuantiosos recursos asignados: barrios indignos con casas indignas".
La participación de Grabois -explica la denuncia-.estaría dada por el hecho de que "sin él no puede entenderse, ni habría podido concretarse, toda la arquitectura política que permitió el fraude expuesto, comenzando por la designación de la Sra. Miño al frente de la SISU. Ya vimos que los proyectos fueron entregados al MTE y CTEP, ambas organizaciones sociales lideradas por el Sr. Juan Grabois", o "Juan 23", como dicen las pintadas en el paredón lindero, recordando la campaña del dirigente social candidato a presidente el año pasado.
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