Defensa Civil y el Servicio Geológico nacional
coordinan acciones para instalar equipos de monitoreo adquiridos tanto por el
Estado neuquino como por Nación. En marzo se iniciarían tareas en los volcanes
Copahue y Lanín.
Luego de llevar adelante un proceso de trabajo
de articulación en pos de unificar las estrategias de vigilancia volcánica
entre la provincia, Nación y autoridades de Chile, en las próximas semanas se
concretaría la instalación de las primeras estaciones de monitoreo de propiedad
nacional en territorio neuquino.
Con este objetivo, el subsecretario de Defensa
Civil y Protección Ciudadana del ministerio de Ciudadanía, Martín Giusti y el
representante del Observatorio Argentino de Vigilancia Volcánica del Servicio
Geológico Minero Argentino (Segemar), Sebastián García, mantuvieron una reunión
para delinear los pasos a seguir para la próxima puesta en marcha de la primera
etapa del observatorio vulcanológico de Neuquén.
“Segemar ya ha avanzado con la compra de
equipamiento propio y en lo que queda del verano queremos hacerlo con la instalación
del observatorio vulcanológico en Neuquén”, detalló Sebastián García y agregó
que “también se está finalizando el acondicionamiento de la nueva delegación
del organismo en Neuquén, que va a funcionar como un proto-observatorio hasta
que podamos construir un edificio propio”.
Por su parte, Giusti destacó la importancia de
contar con equipos instalados en Argentina, más allá de la buena articulación
que se ha logrado con el Servicio Nacional de Geología y Minería (Sernageomin)
de Chile en materia de vigilancia volcánica. “Para nosotros el hecho de que
esté involucrado Segemar con provincia nos va a permitir anticiparnos en la
prevención de las poblaciones y, en este sentido, la instalación de
equipamiento en la Argentina nos permite dar un salto de calidad en lo que hace
a acciones preventivas y alertas tempranas”, indicó el subsecretario.
“En Neuquén tenemos la ventaja de contar con
equipamiento adquirido y podemos complementar la colocación que realice
Segemar”, resaltó Giusti y añadió que “en esta tarea, no sólo tiene
intervención el área de defensa civil sino que también la Optic cumplirá un rol
fundamental para garantizar la comunicación y transmisión de datos”.
Respecto del estado actual de la red de
monitoreo de riesgo volcánico en la provincia, el referente del Segemar indicó
que “el volcán Copahue tiene actualmente una red en territorio argentino pero
con equipamiento de Chile”.
“Aunque recibimos esa información, queremos
empezar a instalar nuestros equipos para tener capacidades propias”, explicó
García y detalló que “por eso la idea en el Copahue es complementar la red
existente sumando sólo dos equipos más”. En cambio, en el caso del volcán Lanín
se proyecta la instalación de cuatro estaciones de monitoreo dado que
actualmente se cuenta con una en el sector chileno, y tres cuartas partes del
volcán están en territorio argentino.
“La idea es poder generar esa información para
llevar tranquilidad a la gente y brindarles mejores herramientas a las
autoridades de la provincia, que son las encargadas de tomar las decisiones en
caso de que se produzca algún evento”, sostuvo en miembro del servicio
geológico nacional y subrayó que “nosotros simplemente informamos acerca de
cuál es la actividad del volcán por eso es muy importante la colaboración y la
complementación entre los distintos actores”.
Cabe destacar que, si bien en esta primera
etapa se avanzará con los volcanes Copahue y Lanín, el próximo año se dará
continuidad a este proceso porque el proyecto contempla también el monitoreo de
los volcanes Tromen, Laguna del Maule y Domuyo.
Prioridad dentro del Observatorio Nacional
De acuerdo con los trabajos realizados por el
Observatorio Argentino de Vigilancia Volcánica, existen 120 volcanes
considerados activos en el país, de los cuales 38 son responsabilidad
argentina. Dentro de este último grupo, se establecieron 15 como prioritarios a
la hora de destinar inversiones en materia de prevención.
“Las autoridades del Segemar decidieron
comenzar las tareas de monitoreo por el sector donde se encuentran las
poblaciones más cercanas a los complejos, que son Mendoza y Neuquén”, explicó
el representante de observatorio argentino y agregó que “por eso en principio
se va a invertir en monitorear 8 volcanes ubicados en estas provincias”.
Mapas binacionales de riesgo volcánico
Como parte del trabajo de cooperación entre
los servicios geológicos de Argentina y Chile, del 19 al 29 de marzo próximo el
Segemar organiza un encuentro que apunta a avanzar en la elaboración de mapas
binacionales de riesgo volcánico.
El evento tendrá su sede en la localidad de
San Martín de los Andes y contará con la participación de personal del servicio
geológico de Estados Unidos que ofrecerá capacitaciones en modelado del lahares
del volcán Lanín.
El primer mapa binacional en concretarse será
el de Laguna del Maule, por un pedido especial de Chile, y después seguirán el
Copahue y el Lanín.
Potencial polo tecnológico
Como el observatorio vulcanológico de Neuquén
deberá funcionar las 24 horas, durante los 365 días del año, desde el Segemar
se busca firmar convenios con universidades locales para poder establecer un
sistema de pasantías.
“El objetivo del observatorio es generar las
alertas tempranas y los informes a las autoridades, pero después ese enorme
caudal de información se puede reprocesar para otro tipo de análisis. Ahí
entendemos que las universidades tienen un rol importante, para la formación
del recurso humano”, consideró el representante de Segemar.
“En este ámbito se trabaja con metodologías
muy específicas y no hay gran cantidad de profesionales calificados en la
materia a nivel nacional, por eso entendemos que poder generar un polo
tecnológico de volcanes en Neuquén es de gran importancia”, concluyó.
PUBLICADO EL 12-02-2018