El juez Néstor Barral, titular del Juzgado Federal N°3 de Morón, está
cargo de la investigación al líder camionero. Los detalles de la maniobra.
El líder camionero Hugo Moyano sumó un nuevo frente judicial debido a
una investigación que lleva adelante el
Juzgado Federal N° 3 de Morón, a cargo del juez Néstor Barral, por
presunto lavado de dinero en la compra de propiedades.
Se trata de un magistrado que tuvo varias causas destacadas en su
haber, como la investigación por administración fraudulenta en el Hospital
Posadas o el caso del poderoso narco colombiano que estaba detrás del Café de
los Angelitos, allanado en septiembre pasado.
El expediente judicial contra Moyano se abrió debido a una denuncia
vinculada a la adquisición irregular de dos viviendas en la exclusiva zona de
Parque Leloir, que se habría hecho a través de empresas pertenecientes al
presidente de Independiente. Barral busca determinar si el dinero utilizado
para la compra provino de la sobrefacturación al sindicato de Camioneros
mediante esas empresas.
Las compañías en cuestión están a nombre de los hijastros de Moyano,
Juan Manuel Zulet y Valeria Salerno, y tienen como principales clientes tanto
al Sindicato de Camioneros como a entidades afines, tales como la obra social
del gremio.
Se trata de Aconra Construcciones SA, Iarai SA, que brinda servicios
relacionados con la salud y gerencia la Obra Social de Camioneros (OSCHOCA) y
Dixey SA, compañía dedicada a confeccionar ropa de trabajo y a brindar
servicios de consultoría informática. Las tres firmas desempeñan actividades
que permiten ser facturadas a Camioneros.
Además, Iarai SA, Dixey y Aconra Construcciones contratan la misma compañía
de seguros, Caminos Protegidos Aseguradora de Riesgos de Trabajo, administrada
por Pablo Moyano, hijo de Hugo y vicepresidente de Independiente.
Otro dato que surge de la investigación es que Aconra Construcciones
fue la encargada de llevar a cabo la construcción de la ex clínica Antártida,
donde Camioneros inauguró hace unos días su sanatorio médico, evento en el que
Moyano mantuvo un cruce con varios funcionarios. El complejo hotelero que el
gremio de los Moyano posee en Mar del Plata también fue levantado por Aconra
Construcciones.
En cuanto a las viviendas investigadas por Barral, una de ellas es la
mansión que el ex secretario general de la CGT posee en la avenida De los
Baqueanos al 800, en Parque Leloir. Se trata de una residencia con un valor de
mercado superior al millón de dólares. Dixey SA, una de las tres empresas del
holding familiar, tiene ese domicilio y un número de teléfono asociados en sus
registros.
Con estos datos, el juez investiga si la propiedad fue puesta a nombre
de Dixey SA para esconder a su verdadero dueño, Hugo Moyano. A estos datos,
debe sumarse que en el sitio de internet de ARBA, el terreno está registrado
como baldío, con una valuación fiscal muy inferior al valor real que tiene la
mansión del dirigente sindical.
La otra propiedad en la mira de la Justicia también está en Parque
Leloir y es en la que registró su domicilio particular Liliana Zulet, la esposa
de Moyano. Zulet es miembro del directorio de Dixey SA. En este caso se da una maniobra similar, ya
que Aconra Construcciones tiene un número telefónico vinculado a la dirección
de esa vivienda, por lo que el juez intenta determinar si la intención del
gremialista es esconder su participación en la transacción.
En los últimos días, Moyano sumó más de un dolor de cabeza. Su gremio,
junto a los que conducen Luis Barrionuevo y Carlos Acuña, quedaron complicados
por una denuncia de AFIP. Pero no es todo. Hace dos semanas, se dio cuenta de
la megadenuncia contra el presidente de Independiente y OCA, a quienes acusan
de evasión y lavado por cuatro mil millones de dólares.
PUBLICADO EL 23-01-2017