Las protestas ocurrieron luego
de que este viernes dejara de tener validez el billete de 100 bolívares, el de
mayor valor y circulación.
Las protestas se dieron en
varias ciudades del interior después de que este viernes dejara de tener
validez el billete de 100 bolívares, el de mayor valor y circulación, que el
mandatario mandó a sacar de las calles hace menos de una semana para combatir
supuestas "mafias" que lo acaparaban en la frontera con Colombia.
Teniendo en cuenta que más de
tres cuartas partes del dinero que circulaba en Venezuela lo hacía en billetes
de 100 (0,15 dólares a la tasa oficial más alta), el país quedó prácticamente
sin efectivo al no haber rastro de la anunciada llegada de los primeros valores
de un nuevo cono monetario de hasta 20.000 bolívares.
En tanto el extraviado
Presidente Maduro resaltó los incendios de dos sedes de bancos estatales en
Guasdalito (centro-oeste), en el que dijo que participaron dirigentes
opositores que formaban parte de "mafias de bachaquerismo (contrabando) y
tráfico de dinero" que operan mayormente en esa zona limítrofe con
Colombia.
"Serán capturados y puestos
tras las rejas en las próximas horas", manifestó Maduro. "Mano de
hierro, ¡compadre!", gritó.
"Locura" antes de
Navidad
Con solo tres días para
depositar los billetes de 100 en los bancos, el presidente aseguró que quienes
aún tuvieran esa denominación podrían hacer su "canje" a partir de
este viernes en las dos únicas sedes del Banco Central de Venezuela (BCV), en
Caracas y Maracaibo (oeste).
Pero eso no ocurrió.
Aunque más de 10.000 personas
hicieron filas en Caracas bajo fuerte custodia militar, el BCV no tenía las anunciadas
primeras monedas de 10, 50 y 100 bolívares ni los billetes de 500 y solo hizo
depósitos electrónicos en las cuentas de los solicitantes.
"Es la peor locura que
podían hacer en estos días antes de Navidad. Habría que poner a los del
gobierno a hacer estas colas y que se queden sin billete", decía María
Barbeira, una jubilada de 72 años.
Las autoridades tampoco
distribuyeron a los bancos las nuevas monedas y billetes, como había prometido
hacer desde el jueves. Entretanto, los comercios solo aceptaban pagos con
tarjeta o con los escasos billetes viejos de 10, 20 y 50 bolívares, y la
mayoría de cajeros automáticos no daban dinero.
Maduro pidió
"comprensión" para que el proceso de transición "termine de
salir bien" y ordenó que hasta el próximo día 20 el transporte gestionado
por el Estado sea gratuito, así como un descuento temporal de 2% en impuestos
para pagos electrónicos.
"¿Que puede haber algunas
dificultades mientras superamos esta situación? Era obligante, ineludible,
inevitable, sacar de circulación los billetes de 100", manifestó el
mandatario en la tarde.
Sin saber qué pasó con los
millones de monedas y billetes que el gobierno dijo que debían llegar
progresivamente importados desde el exterior, la desesperación se adueñó del
país petrolero, donde la inflación de tres dígitos hace que se necesiten fajos
de billetes para hacer una simple compra, y muchos alimentos y medicamentos
están en grave escasez.
"Caos inducido" por
el gobierno
"Denunciamos ante el mundo
que el pueblo venezolano ha sido sometido a una situación de caos inducido
desde el gobierno", señaló la MUD en un comunicado previo a la acusación
de Maduro, en el que pedía al Ejecutivo "rectificar"; mientras que el
líder opositor Henrique Capriles propuso una prórroga para el depósito de
billetes en agencias bancarias.
Nadie creía que los viejos
billetes se fueran sin que hubieran llegado los nuevos.
"¡Esto es el mundo al
revés! Si normalmente no hay comida, ahora resulta que ya no hay ni billetes
para comprar", dijo a la AFP Jesús García, un vendedor informal de 21 años
que llegó a las cuatro de la madrugada al BCV.
"¿Por qué no dolarizan el
país? ¡Esto no sirve!", gritaba en la cola Anais Ríos, otra vendedora
ambulante que depende del efectivo para trabajar.
Que el BCV no tuviera los nuevos
billetes era más complicado aún para quienes no poseen cuenta bancaria como
Pedro Jose Oviedo, electricista de 70 años que cargaba una bolsa de plástico
con sus ahorros en billetes de 100, desafiando la inseguridad en las calles
caraqueñas.
El Banco Central daba a esas
personas 'bouchers especiales', que deben canjearse luego en agencia bancarias,
aunque ahí no haya dinero ahora.
"Estas son las medidas más
absurdas que he visto nunca, pero aquí nos tenemos que quedar... A ver que día
amanece uno frío (muerto)", decía el anciano.
Analistas tratan de poner luz a
los efectos de esta insólita situación, que ya hizo bajar casi a la mitad la
cotización del llamado dólar paralelo.
PUBLICADO EL 17/12/2016
POR INFOALLEN – MAIL: noticias@infoallen.com.ar