Según testimonios que figuran en la nutrida causa,
referente a la desaparición del joven rionegrino, el muchacho no se estaría
identificando como ‘Rodrigo’, pero por las características físicas que han
descripto personas que afirman haberlo trasladado en varios puntos de Río
Negro, se trataría de Rodrigo, quien hace muy poco se lo ubicó en la capital de
la vecina provincia del Neuquén. Rodrigo Hredil, de 23 años, desapareció el 31
de julio de 2015 en la localidad de Las Grutas.
Rodrigo había iniciado un
tratamiento sicológico con medicación incluída, pero como se lo veía bien, se lo separó de la terapia y de la
medicación, no por negligencia, sino porque ‘lo
veían muy bien’, han explicado sus padres, quienes nunca le
descuidaron. Pero el o los profesionales
que lo atendían, no pudieron dimensionar
la gravedad de la dolencia de la mente del joven grutense, y no pudieron
advertir tampoco a los padres de Rodrigo, de los peligros de alejarlo del
tratamiento.
Según consta
en la causa, Rodrigo fue a la comisaría en Las Grutas y dijo que estaba
escuchando voces que le indicaban que debía matar a su padre. En ese momento
los uniformados ahí presentes, que escucharon lo que el joven les estaba
diciendo, le invitaron a sentarse, tratando
de actuar con naturalidad, al tiempo que trataron de inmediato establecer
comunicación con la familia y/o centro
de salud. Rodrigo se sentó y estuvo ahí por pocos minutos, hasta que salió intempestivamente
sin dar lugar a detenerlo y sin poder preveer la resolución del joven, de irse
de su casa.
El primer testimonio de una
persona que dice haber transportado a alguien, que respondía a las características
físicas de Rodrigo, fue un camionero lo habría llevado hasta Río Colorado. El
hombre se presenta a dar testimonio de esto, cuando a través de los medios de
comunicación, se entera de la desaparición del joven y que la persona que él
había llevado hasta RC, podría ser Rodrigo. Este testimonio no se tuvo en
cuenta, en el primer momento.
Los padres del joven Hredil
nunca dejaron de buscarlo, han contratado detectives privados y han cambiado de asesor legal, por caso, porque no estaban ‘conformes’ en
cómo iba la causa, lo que demuestra el
celo con que están buscando a su hijo.
La semana pasada, una docente
declaró haberlo visto en Cipolletti. La mencionada cuenta que vio un joven, que respondería a las
características físicas de Rodrigo y que
al llamarlo con ese nombre, el chico habría salido corriendo.
Según lo que consta en la causa,
Rodrigo sufría de ‘delirio místico’, por lo que leía mucha información acerca de
metafísica, y contemplaba el cielo en busca de luces que evidencien entidades
cósmicas. Por ello, pedía a sus papás que
lo llevaran a lugares específicos, como ir a pasar una semana al Cerro Uritorco,
a Machu Pichu, al desierto, para poder observar los cielos.
Rodrigo no estaría respondiendo
a su nombre, el distintivo para ubicarlo son sus ‘brackets’, porque es probable
que su aspecto general no tenga relación, a lo que todos vemos en las fotografías de
cuando vivía junto a sus padres. Al parecer si se lo ubica, hay que actuar sin
que Rodrigo se de cuenta de que se lo está reconociendo, para que ‘no se
espante’ y se vaya, como lo que describe la docente de Cipolletti.
Si usted cree que lo está viendo
o lo ha visto, puede comunicarse con la Fiscalía de Delitos contra las personas
al teléfono (02920) 15616598 o a la Unidad Policial más cercana. El Ministerio
de Seguridad y Justicia ofrece una recompensa de hasta $250.000 por información
que conduzca al paradero cierto de Rodrigo. (FM Libra 106.7 Allen- Río Negro)
PUBLICADO EL 26/10/2016
POR INFOALLEN – MAIL: noticias@infoallen.com.ar