La agencia de seguridad alimentaria alemana
Foodwatch acaba de hacer pública una investigación que asegura que se han
hallado en varios productos de chocolate agentes considerados posibles agentes
cancerígenos. Kinder, Lindt y Rübezahl son algunas de las marcas afectadas a
las que la agencia ha pedido que retiren estos productos, aunque éstas de
momento se han negado.
Varios medios germanos como The Local se han hecho
eco del controvertido estudio elaborado por investigadores independientes.
Según el trabajo, tras someter a varias pruebas a una larga lista de productos
hasta en 20 productos diferentes la agencia encontró tasas altas de hidrocarburos
aromáticos derivados de aceites minerales (MOAH, en inglés), un producto
considerado posible cancerígeno.
Foodwatch ha pedido la retirada de tres de ellos al
encontrar “niveles peligrosos”: las barritas kinder Riegel (de la italiana
Ferrero), Fioretto Nougat Minis (de Lindt) y Sun Rice Classic Schoko Happen (de
la casa alemana Rübezahl) han sido las tres compañías señaladas a las que
agencia alimentaria ha pedido, sin éxito, que hagan públicos los resultados y
retiren los productos. “Pueden desencadenar en cáncer y causar perturbaciones
genéticas , pero a pesar de ello los fabricantes se niegan a retirarlos de la
venta”, lamenta Foodwatch en su página web.
La agencia de seguridad alimentaria alemana
Foodwatch acaba de hacer pública una investigación que asegura que se han
hallado en varios productos de chocolate agentes considerados posibles agentes
cancerígenos. Kinder, Lindt y Rübezahl son algunas de las marcas afectadas a
las que la agencia ha pedido que retiren estos productos, aunque éstas de
momento se han negado.
Una agencia ‘solvente’
Para la organización de consumidores y usuarios
española Facua, la agencia de seguridad que se ha encargado de la investigación
es lo suficientemente “solvente” como para que la Agencia Europea de Seguridad
Alimentaria haga una evaluación al respecto, de “explicaciones” y tome medidas,
ha reconocido a este medio Rubén Sánchez, el portavoz de Facua. Sánchez
reconoce que ya han recibido llamadas de consumidores preocupados, por eso
recuerda que “comerte una chocolatina de estas no provoca cáncer” sino que se
trata de cancerígenos a largo plazo, por efecto acumulativo.
No obstante considera que, independientemente de
las medidas que se podría plantear la EFSA, una solución de urgencia debería
ser sustituir el envoltorio conflictivo. En este sentido, la marca italiana
Ferrero ha salido al paso de las críticas asegurando que trabajan en
“soluciones técnicas para minimizar en la medida de lo posible estas
sustancias” y añaden que “los productos Kinder, y en concreto Kinder Riegel,
son seguros, creados con la máxima calidad y siempre en conformidad con las
legislaciones alimentarias locales y europeas”.
Según la investigación, estas sustancias peligrosas
se encontrarían en el envoltorio y penetrarían en el chocolate. La agencia
asegura que los niveles de estos agentes son “inaceptables” para el consumo
mientras que la Asociación de Confitería Alemana afirma que se pueden consumir
sin problemas y que no suponen un riesgo para la salud.
PUBLICADO EL 11/07/16
POR INFOALLEN – MAIL: noticias@infoallen.com.ar