YPF subió los
precios de los combustibles en todo el país, 24 horas después que Shell tomó la
misma decisión. Los aumentos están pautados con el Ministerio de Economía, que
llegó a un acuerdo con las productoras de petróleo y las refinadoras para
trasladar gradualmente el impacto de la devaluación del peso, en un sendero de
cuatro meses, de febrero a mayo.
Los incrementos previstos son, además del 6% para febrero
y el 6,1% para marzo, el 5,4% en abril y el 3,8% en mayo, aunque como el tipo
de cambio se mantiene debajo del punto de referencia del acuerdo ($ 8 por
dólar) podría haber un ligero descuento en la última cuota.
El precio de la nafta súper superó por primera vez la
barrera psicológica de los $ 10 en Capital Federal, aun cuando en el interior
ya hace meses que se pasó ese tope y algunas estaciones de particulares en la
Ciudad de Buenos Aires también lo habían hecho. El litro de súper de YPF se
ubicó en $ 10,07 desde este fin de semana y el de Shell en $ 10,53.
La premium de YPF cuesta $ 11,33 y la de Shell, $ 11,28,
lo que indica una tendencia a que los valores al público estrechen las
diferencias entre las compañías. El diésel de mayor calidad, en tanto, tiene
apenas una diferencia de 2 centavos entre las dos compañías en Capital: $ 10,55
en YPF y $ 10,57 en Shell.
Esas dos petroleras concentran el 72,6% de las ventas a
nivel país, con el 56,48% para YPF, y el 16,43% para Shell. Las siguen Axion
(marca Esso) con el 12,4%; Petrobras, con el 6,7%, y Oil Combustibles con el
4,2%, según datos de la Secretaría de Energía publicados en el sitio
surtidores.com.
Héctor Valle, economista de FIDE y miembro del directorio
de YPF, dijo ayer en declaraciones radiales que la petrolera presidida por
Miguel Galuccio "va a seguir aumentando los precios de los combustibles
con el objetivo de poder llegar al abastecimiento interno". Añadió que YPF
"está desenvolviendo este proyecto por una decisión de la presidente de la
Nación de sostenernos vía precios y lo está pagando toda la comunidad".
También indicó que si se mira el balance "se va a
advertir que la principal fuente de ingreso es la actualización de los precios
de los combustibles y sobre todo del gas nuevo", en referencia en este
último caso al valor de u$s 7,50 por unidad , sobre el cual la diferencia con
el valor promedio de u$s 2,5 que pagan los usuarios es afrontada por el Estado
nacional.
Otro dato es que el Gobierno está permitiendo trasladar
todo el efecto de la devaluación a los precios de los combustibles.
Esto beneficia en particular a YPF, que compra a terceros
una pequeña parte del petróleo con el que produce combustibles porque usa
mayormente crudo propio e importa una porción no significativa del total de
combustibles que vende. Asimismo, la importación de petróleo liviano está
también subsidiada por el Estado desde este año.
Entre abril y mayo, los valores de los combustibles al
público se ajustarán en promedio un 9,4%, según lo pautado con el Ministerio de
Economía, con lo cual desde la devaluación de fines de enero, los precios
terminarán incrementándose el 23,6%. Ámbito Financiero.
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